EstƔbamos todos sentados en la sala de nuestra nueva casa en South Gate (mis padres y mis cinco hermanos) decidiendo mi futuro.
Me acababan de invitar a hacer una prueba con LAFC como jugador de la academia. AgradecĆ la invitación, pero no estaba seguro de quĆ© hacer. DejarĆa un club que amaba por uno que no sólo era extraƱo para mĆ, sino extraƱo para todos. El aƱo era 2016, LAFC era completamente nuevo, un club del que el mundo nunca habĆa oĆdo hablar.
La primera vez que oĆ hablar del LAFC fue unas semanas antes. Yo jugaba para un club llamado Fullerton Rangers. DespuĆ©s del partido, Joey Cascio (mi primer entrenador de la academia del LAFC) se acercó a mis padres y les dijo: āEstamos creando el primer equipo de la academia de LAFC. Queremos que Diego participeā.
DespuƩs de ir, me pidieron que me uniera oficialmente al club. Y ahora estaba sentado en la sala con las personas que mƔs quiero: mi mamƔ y mi papƔ (Luis Enrique y Sandy), y mis cinco hermanos (MƔximo, Ulises, Celina, Isaac y Alex) que son todos mayores.
SĆ, soy el bebĆ©. Yo tenĆa diez aƱos.
Tampoco mencionĆ© que nuestra casa se habĆa quemado unos meses antes, lo que nos obligó a mudarnos a nuestra nueva casa en South Gate, donde ahora estĆ”bamos sentados.
No importaba la edad que tuviera, unirme a un nuevo club siempre serĆ” una gran decisión. En cada equipo en el que juguĆ©, siempre lo di todo. Amaba a mis compaƱeros de equipo. Amaba a sus familias. ĀæPor quĆ© cambiarĆa las cosas?
Pero mis padres estaban pensando en la perspectiva mas grande. En los clubes que no estĆ”n afiliados a un equipo profesional, generalmente juegas hasta un nivel de mayor edad, U-18, y luego esperas que una universidad te ofrezca una beca o que un club profesional te invite. La mayorĆa de los chicos no obtienen ninguna de las dos cosas.
LAFC me presentó un camino para convertirme en profesional. Sin embargo, lo Ćŗnico en lo que estaba pensando era en cuĆ”nto extraƱarĆa a mis compaƱeros de Fullerton.
Mi familia decidió que deberĆa tomarme unos dĆas para pensar. Durante esos dĆas tuve muchas emociones, pero al final dije: "Lo voy a hacer".

Algunos aƱosĀ despuĆ©sĀ en el partido contra Seattle a principios de esta temporada. Antes del partido, estĆ”bamos en el estacionamiento; HabĆa cĆ”maras y personal de seguridad por todos lados, y filas de autos conducidos por otros jugadores del primer equipo deĀ LAFC. Estaba nervioso pero sobre todo emocionado. FueĀ mi primer partidoĀ como miembro del primer equipo.
HabĆa recorridoĀ un largo caminoĀ desde aquella reunión en nuestra sala.
Soy nativo de LosĀ Ćngeles, nacĆ y crecĆ, por lo que llegar a la plantilla de 25 jugadores delĀ LAFCĀ como un jugador āhomegrownā (un jugador que habĆa sido identificado por el club y desarrollado por su academia) fue un honor especial. Sin embargo, mi historia es mĆ”s profunda que eso.
Mi papĆ” nació en MĆ©xico. Mi mamĆ” nació en Texas. Ambos lados de mi familia provienen de Villa Hidalgo, SanĀ Luis PotosĆ, en el corazón de MĆ©xico.
En mi familia siempre fue el fĆŗtbol. NingĆŗn otro deporte. Mis cuatro hermanos jugaban al fĆŗtbol. Mi club favorito cuando era niƱo era el Club AmĆ©rica porque mi hermano Isaac jugaba en su segundo equipo. TambiĆ©n me gustaba el Barcelona porque tenĆa a mi jugador favorito,Ā CarlesĀ Puyol. Fue capitĆ”n delĀ BarƧaĀ en los aƱos anteriores aĀ Messi.Ā Siempre admiré el liderazgo deĀ Puyol. Y Ć©l era central, como yo.

DespuĆ©s de unirme aĀ LAFC, fui nombrado capitĆ”n de nuestro equipo de la academia. SeguĆ siendo el capitĆ”n en cada nivel. Tuvimos Ć©xito a lo largo de esos aƱos, incluido ganar el primerĀ trofeoĀ internacional deĀ LAFCĀ en 2018 (CampeonatoĀ ConcacafĀ Sub-13). Recuerdo queĀ BobĀ BradleyĀ [primer entrenador deĀ LAFC] me dijo en laĀ pretemporada de 2020, cuando debutĆ© en un amistoso contraĀ PeƱarolĀ a los 14 aƱos: āTodo lo que aprendes aquĆ, llĆ©valo a la academia, ensƩƱalo y ser lĆder para tu equipo, servĆ al grupoā.
He oĆdo a la gente decir que soy un lĆder natural. Si es asĆ, le doy el crĆ©dito a mis padres. Ambos son lĆderes pero de diferentes maneras. Mi papĆ” siempre estĆ” concentrado, siempre es disciplinado, siempre puntual.Ā Ese soyĀ yo. Odio llegar tarde. Mi mamĆ” a veces llega tarde pero siempre tiene energĆa, alegrĆa y fe en Dios. Eso tambiĆ©n es parte de ser un lĆder. Tengo un poco de ambas personalidades en mĆ.
Algunas personasĀ piensan que serĀ lĆder significa hablar mucho. Para mĆ, el liderazgo se trata de construir una relación con cada uno de tus compaƱeros de equipo. Tus compaƱeros de equipo no pueden respetarte si no se conocen. Cuando las cosas se ponen difĆciles, quieres estar seguro de que puedes confiar en la persona que estĆ” a su lado, para poder apoyarse mutuamente.
El club ha crecido mucho desde aquellos primeros dĆas en los que me invitaron a jugar. Nuestras primeras prĆ”cticasĀ fueron partidosĀ de fĆŗtbol eso fue nuestro entrenamiento. Luego comenzamos a practicar enĀ East LA CollegeĀ y luego nos mudamos a CalĀ State LA,Ā donde finalmente construimos nuestro centroĀ de practica.
Estoy orgulloso de haber desempeƱado un papel en la construcción del LAFC. El crecimiento del club, el proceso de convertirse en el equipo de fĆŗtbol de Los Ćngeles, para mĆ, todo comienza con nuestros seguidores. Recuerdo la primera vez que nuestro equipo [Sub-12] jugó contra el Galaxy. Un montón de seguidores del LAFC asistieron al partido. Ā”No lo podĆamos creer! Ā”Ćramos sólo un grupo de niƱos de 11 aƱos! Fue entonces cuando supe que los fanĆ”ticos del LAFC eran diferentes. Que este club era diferente.

Lo sentĆ nuevamente a principios de este aƱo cuando juguĆ© nuestro partido deĀ la USĀ OpenĀ CupĀ contraĀ Monterey Bay. JuguĆ© los 120 minutos, mĆ”s la tanda de penaltis. Ā”Se sentĆa como si estuviĆ©ramos allĆ para siempre! TambiĆ©n fue un partido frenĆ©tico. DespuĆ©s de la prórroga, estaba empatado 2-2, y despuĆ©s de cinco rondas de penales, seguĆamos empatados. HabĆamos elegido a nuestros cinco lanzadores de penales, pero nunca elegimos a un sexto. Gritaron mi nombre desde la banca apenas unos segundos antes del siguiente tiro. Tuve que salir y hacerlo.
Mi papÔ dice que puede darse cuenta de mi confianza en una situación de penales por la forma en que camino hacia el centro. "La forma en que abordas esa oportunidad dice qué tipo de persona eres", dice. Dejé la pelota y respiré hondo. Les acababa de decir a mis compañeros que iba a disparar directo al medio y eso fue lo que hice.
Fue el último penal que lanzamos porque después de marcar, nuestro portero Eldin [Jakupovic] se acercó a mà y me dijo: "No te preocupes, yo me encargo de esto".
Y efectivamente, bloquea su penal. Ese si que fue un juego. Nos volvimos locos.
TambiĆ©n juguĆ© los 90 minutos de la siguiente ronda contra elĀ Galaxy. Mira, sĆ© que son nuestros rivales, pero estar en la misma cancha conĀ ChicharitoĀ fue muy importante para mĆ. Mi familia es de MĆ©xico y Ć©l es unaĀ superĀ estrella mexicana. Lo vi todo el tiempo mientras crecĆa. Recuerdo estar junto a Ć©l durante ese partido y ver el nombre en su camiseta:Ā CHICHARITO. No puedo describirlo. Siento lo mismo cuando entreno con Carlos Vela. Es un compaƱero de equipo, pero tambiĆ©n es⦠Carlos Vela.

Lo que mĆ”s destaco de esos dos partidos deĀ la USĀ OpenĀ CupĀ fue tenerĀ a mis padres allĆ. Para aquellos de ustedes que conocen a mi mamĆ”, ella siempre grita mĆ”s fuerte en mis juegos. En los juegos de la academia, ella siempre dirigĆa los cĆ”nticos. Si tuviera que perder un partido, siempre estaba mĆ”s tranquilo. Escucharla durante el partido deĀ MontereyĀ BayĀ y luego encontrarla despuĆ©s del partido delĀ GalaxyĀ y abrazarla a ella y a mi papĆ”, me diĀ cuenta de que estaban orgullososĀ de mĆ. Eso es todo lo que cualquier niƱo quiere.
Mi familia es muy importante para mĆ. Pensando en el momento en el que se incendió nuestra casa,Ā LAFCĀ se acercó a nosotros y todo estaba sucediendo muy rĆ”pido: mi familia era mi apoyo. Mi base. RecurrĆ a ellos en busca de apoyo. Al igual que confiamos en nuestrosĀ fansĀ cuandoĀ necesitamos energĆaĀ o un empujón.
TodavĆa pienso en esa conversación que tuvimos juntos en nuestra sala. Si solo hubiera hablado con mi papĆ”, o solo con mi mamĆ”, o con uno de mis hermanos, es posible que no hubiera tomado la misma decisión. Pero con todos allĆ y todos diciĆ©ndome que me apoyaban, supe que estarĆa bien.
Es como jugar un partido en casa enĀ BMOĀ StadiumĀ lleno. Cuando toda tu familia te apoya, no puedes equivocarte.

Esta es la tercera historia de una serie en la que presentamos a los jugadores del LAFC en sus propias palabras. Leer acerca de, Erik DueƱass y Nathan Ordaz.
This is the third story in an ongoing series that introduces LAFC players in their own words. Read about, Erik DueƱas and Nathan Ordaz.